FRASE

Si pensabais que se me había olvidado esta sección o que no iba poner más de nuestras frases, pues estabais en un error, aquí va la de hoy. Es una frase muy conocida y por ello sencilla.

Es la conocida y utilizada frase de “A buenas horas mangas verdes” que como sabéis solemos aplicar cuando alguien se hace algo fuera de plazo o cuando ya no tiene sentido hacerlo.
Pero como siempre, situémonos, andamos por las tierras de la Corona de Castilla, allá por el lejano Siglo XIII y la delincuencia campa a sus anchas y nunca mejor dicho, por tierras y campos castellanos. La gente se queja y las autoridades osease el rey decide crear un cuerpo que podríamos definir como de policía rural, una especie de guardia civil de la época y que serían pagados por los concejos, ayuntamientos, de la época. Esta policía conocida como hermandades tendría la tarea de vigilar los campos y caminos, ir en ayuda de los viajantes y acudir prestos a sofocar los incendios que pudieran declararse en pueblos y bosques. Todas estas hermandades fueron unificadas bajo el reinado de los Reyes Católicos en una sola que cogió el nombre de la Santa Hermandad y que cumplió su cometido policial hasta el año 1834 en que fueron disueltos. Decir que desde el comienzo, lo que diferencia a estas hermandades era el color de las mangas de sus jubones. Como habréis adivinado este era el color verde.

Decir también que, desde el principio la rapidez no fue uno de los rasgos distintivos de estos policías, con lo cual solían llegar siempre cuando su presencia ya no era necesaria.

Y así, teniendo ya las dos partes integrantes de nuestra frase, solo tenemos que esperar a que la gente fuese dando forma a la frase que se ha llegado hasta nuestros días con el mismo significado que tuvo en su origen.

Como dije las Hermandades fueron disueltas en 1834 solo 10 años antes de la fundación de la Guardia Civil, así que son por derecho sus auténticos antecesores.