ELECCIONES
Hoy es el primer
martes después del primer domingo de noviembre y con esta extraña forma los
americanos indican que cada cuatro años hay elecciones para entre otras cosas
elegir al presidente, cambiar el senado y cien pequeñas acciones, desde
legalizar la marihuana hasta prohibir la pena de muerte o cosas menos
transcendentes como si el sexo anal sigue siendo delito en determinado estado.
Hemos aprovechado que A, tenía que dar un par
de charlas en la conferencia anual de medicina estadounidense, para coger
vacaciones y a estar 3 semanas por la costa Este de los EEUU. Nuestra primera parada es Boston, nos alojamos
en un hotel que pertenece al YMCA. Es un
hotel un tanto extraño por lo menos para mi, es un edificio de unas seis
plantas, en las que solo se pueden alojar mujeres, salvo en la primera planta
que admite matrimonios, nunca hombres solos. Nos hemos alojado en una
habitación con baño compartido, no es lo que nos gustaría peor es lo que la
organización del encuentro medico a encontrado.
Los primeros días
paseo solo por la ciudad, sigo los ladrillos amarillos tal Dorothy en busca de
su perrito, que nos muestran la “freedom trail”. La Senda marca edificios y
lugares que tuvieron especial significación en los años que condujeron a la
independencia. Aquí la iglesia donde se redacto el primer borrador de la
constitución, aquí el cementerio donde están enterrados algunos de los héroes
que lucharon contra los ingleses, esta es la campana con la que Paul Revere
aviso de la llegada de los casacas rojas. Interesante pero no espectacular, me
interesa más la zona conocida como “Heritage Black”, la zona de la herencia
negra con sus luchas civiles. Paseo por el Boston Common, el parque del centro
de la ciudad, con sus árboles que empiezan a coger tonos rojizos. Voy en busca
del lugar donde juegan los Celtics, mitómano que es uno, Paseo por barrios donde en las escaleras de
las casas hay aún calabazas de la cercana festividad de todos los santos, veo a
unos obreros comiendo un bocadillo mientras descansan. Visito el celebre
Cheers, paseo y miro y entre las cosas
que veo es la campaña electoral que en esos días tiene lugar, paseo por el
capitolio estatal, replica en pequeño el que hay en la capital de la nación, veo
hombres anuncio a la salida del metro solicitando el voto para distintos
candidatos, propaganda electoral colgada de vallas, pegatinas insultando a Bush
en los coches, otras que proclaman su
orgullo por los soldados en Irak. Veo una camioneta con un ataúd en la parte
trasera, el ataúd va envuelto en una bandera norteamericana, y lleva un cartel
que dice caído por vuestra libertad.
Es el día de las
elecciones y a diferencia de España que las urnas siempre s ponen en colegios o
ayuntamientos, aquí las urnas las ponen en cualquier sitio, tanto es así que el
vestíbulo de nuestro hotel ha amanecido convertido en centro electoral. Los
ciudadanos solo tienes dos horas libre para votar y las colas que se han
formado a la entrada del recinto son largas. Es el mismo día de las elecciones
pero los partidarios de los distintos candidatos siguen haciendo campaña,
montando mítines a las puertas de nuestro hotel. Incluso dentro del propio
“colegio electoral” hay propaganda animando a votar por una determinada opcion.
No hay mesas con las papeletas de los partidos a la vista. La mesa electoral la
forman, tres personas, un policía, y la persona encargada de hacer que la maquina troqueladora funcione
correctamente. Es el mismo tipo de maquina que propició el pucherazo en Florida
en las primeras elecciones que gano Bush hijo. Las instrucciones para votar
están escritas en como poco media docena de idiomas. La gente aguarda la cola
tranquilamente vota y vuelve a sus quehaceres.
La gente esta
ilusionada, según se comenta en la ciudad, parece ser que hay probabilidades de
que Bush, no salga reelegido, claramente tanto el estado como la ciudad son
claramente demócratas. El recuento por la noche desvanece sus ilusiones y
comienza el segundo periodo presidencial del antiguo alcohólico y cristiano
renacido G.W. Bush Hijo.
Salimos a pasear
y nos acercamos aun restaurante cercano a nuestro hotel, que anuncia música en
directo, es nuestra última noche en Boston. Mañana temprano tenemos que coger
un tren que nos llevara hasta New York.
P.D. Fotos tomadas en las calles de Boston esos dias
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